El callejón sin salida en el que se metió el régimen chavista con el fraude cometido el 28 de julio tendría un solo escape. Mantenerse en el poder por la fuerza y sin reconocimiento internacional no era el pan de Nicolás Maduro. Es por eso que repetir las elecciones es la solución que estaría evaluando el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para conseguir impunidad para quienes quedaron expuestos ante el mudo por el descarado robo de las elecciones y de esta manera prepararse para los nuevos comicios que se celebrarían en diciembre con las estrategias de la oposición neutralizadas y ofreciendo tranquilidad a parte de la comunidad internacional.
Fue el expresidente de Colombia, Iván Duque, quien reveló este domingo detalles de la maniobra que se cocina en el máximo tribunal controlado por la dictadura para hacer borrón y cuenta nueva sin que haya consecuencias para los responsables. “Se habla de que en el interior del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela se estaría estudiando la posibilidad de declarar nulas las elecciones, dado que la data pudo haberse corrompido debido al ‘ataque cibernético’ que Maduro quiere utilizar como cortina de humo”.
Según explican el exmandatario colombiano con base en la información que recibió, en la sentencia del TSJ se ordenaría “desproclamar a Maduro, lo cual disminuiría la presión nacional e internacional; realizar una nueva elección presidencial para la primera quincena de diciembre de 2024, lo que permitirá al chavismo salir del rincón donde está arrinconado y reorganizar sus fuerzas; y liberar de inmediato a todas las personas que fueron retenidas como consecuencia de las manifestaciones, lo cual daría un alivio social”.
La excusa del “ataque cibernético”
Con esta decisión, el TSJ jugaría el papel de “policía bueno”, según lo señala Iván Duque. Pero además sería una jugada tan magistral como siniestra para los intereses del régimen de eliminar de la opinión pública la denuncia de fraude, desmotivar las protestas, complacer a un sector de la comunidad internacional y ofrecerle al chavismo una segunda oportunidad para acudir más preparado al nuevo proceso electoral, tanto para una eventual victoria como para organizar un fraude menos evidente.
La excusa barata del “ataque cibernético” sería la clave para el TSJ ordenar repetir las elecciones, alegando que “parte significativa de los datos de la elección fue corrompida”. Habría sido por eso que la Sala Electoral del máximo tribunal chavista pidió al CNE que suministrara toda la información técnica que compruebe el supuesto hackeo. También exigió al organismo electoral entregar las actas, pero ante este eventual escenario de decidir repetir las elecciones, dicha “revisión” se realizaría a puerta cerrada y así evitarían publicarlas.
Duque también advierte que el actual mandatario colombiano, Gustavo Petro, jugaría un rol importante en esta artimaña, ya que con el papel de mediador en el conflicto que se atribuyó junto con los presidentes de Brasil y México, Luiz Inácio Lula da Silva y Andrés Manuel López Obrador, respectivamente, sugerirían precisamente repetir las elecciones.
Maniobra para librarse de responsabilidades legales
Mediante este plan –explica Iván Duque– el presidente del CNE, Elvis Amoroso, se libraría de responsabilidades legales por la divulgación y proclamación de Maduro como ganador de la elección de manera fraudulenta, pues argumentarían que su decisión “se basó en cifras no reales corrompidas” que recibió como consecuencia del supuesto ataque cibernético, y para esto solo necesitarían pagar a una empresa especialista en ciberseguridad para que presente esta versión, a pesar de que el responsable de los aspectos técnicos y blindaje de seguridad, Carlos Hernández, había manifestado que “la red de CANTV estará aislada para evitar acceso externo a los servidores” y, por lo tanto, no podía ser hackeada.
“Este plan debe evitarse. Edmundo González es el presidente elegido por el pueblo, como lo demuestra el 82 % de las actas publicadas por los valientes testigos electorales de la resistencia democrática. Este resultado evidencia un triunfo abrumador. El veredicto del pueblo debe ser respetado”, agrega Iván Duque a su advertencia sobre este perverso plan de la dictadura para repetir las elecciones con la complicidad del TSJ a su servicio.