Los republicanos siguen pulsando los botones para llegar a la Corte Suprema estadounidense con pruebas que sustenten las denuncias de fraude alegadas ya desde la campaña del presidente Donald Trump. En esta oportunidad, le tocó el turno al senador Ted Cruz quien accedió recientemente a presentar argumentos orales ante el máximo tribunal del país en un «caso clave» en Pensilvania.
Se trata del expediente que presentó Mike Kelly, miembro republicano por dicho estado ante la Cámara de Representantes, junto con el candidato del mismo partido al Congreso, Sean Parnell.
Kelly se encuentra entre un grupo de peticionarios quienes afirman que el proyecto de ley de reforma de la votación de Pensilvania de 2019 -conocido como Ley 77 y que permite la votación por correo «sin excusas»- es inconstitucional. Por lo tanto, todas las boletas emitidas allí bajo esta modalidad deberían ser descartadas.
Al respecto, Cruz aseveró durante una entrevista en Fox News que «la Corte Suprema tiene la responsabilidad para con el pueblo estadounidense de garantizar, dentro de sus poderes, que estemos cumpliendo la ley y la Constitución”, ante el posible escenario de que este caso sea llevado al máximo tribunal del país.
Los pasos a seguir
El camino a la Corte Suprema conlleva ciertos procedimientos. En primer lugar, el Tribunal federal debe aceptar y considerar procedente la apelación del binomio Kelly-Parnell que hicieran ante el primer fallo de la Corte Suprema de Pensilvania.
Sobre este tema hay varios grises. Entre ellos, la fecha de la introducción de la demanda, que debía ocurrir antes de los seis meses posteriores a la aprobación de la ley que hoy impugna. La Corte Suprema de Pensilvania afirmó que Kelly había esperado demasiado para presentar su recurso legal, lo que desencadenó una apelación.
Ante una posible demora, el juez Samuel Alito, perteneciente a la Corte Suprema y encargado de estos casos de emergencia, ordenó este lunes a los funcionarios del estado de Pensilvania responder a la impugnación electoral un día antes de lo que se ordenó anteriormente, reportó Daily Wire.
Esta decisión obliga al Tribunal a responder antes de la fecha límite de “puerto seguro”. Esta expresión es la que se usa para señalar la fecha establecida por el gobierno federal para que los estados elijan a sus representantes electorales. Alito había ordenado previamente a los funcionarios que respondieran a Kelly antes del miércoles, un día después de la fecha límite.
Al respecto, Cruz dijo que si la Corte estadounidense aprueba un certiorari –que consiste en un recurso consignado ante el Supremo para que éste requiera a un tribunal inferior el envío del caso y sea examinado-, se prepararía para el argumento oral.
“Estamos viendo en todo el país demandas que desafían el fraude electoral, que desafían las irregularidades en las elecciones, y en Pensilvania esta apelación a la Corte Suprema plantea serias cuestiones que son meramente legales», agregó el senador.
El camino para eliminar 2,6 millones de votos
En concreto, Kelly ha argumentado que los legisladores de Pensilvania ampliaron de manera indebida la votación por correo el año pasado. La falla radica en cómo fue aceptado dicho dictamen: la moción se aprobó con una votación en la legislatura estatal en lugar de haber sido presentada a través del proceso de enmienda constitucional. La activación de un procedimiento bajo esta figura habría requerido una pregunta de votación en todo el estado, entre otros pasos para que pudiese llevarse a cabo y aprobarse.
Por lo tanto, Kelly pidió en noviembre al Tribunal de Pensilvania que prohíba al estado certificar los resultados de las elecciones que incluyan boletas electorales por correo o que descarte también los votos emitidos en los comicios. En ese escenario también se pidió la designación de los legisladores estatales para elegir a los delegados que otorguen los 20 votos electorales, relató The Philadelphia Inquirer.
Dicho medio local explica que si el Tribunal acepta esta apelación esta medida alcanzaría alrededor de 2,6 millones de votantes que ejercieron el sufragio por correo. A su vez, acarrearía el descarte de la mayoría de los votos emitidos bajo dicha modalidad y solo se aceptaría el sufragio de quienes acudieron a las urnas el día de la votación.
Sin embargo, Richard Hasen, profesor de derecho electoral en la Universidad de California-Irvine, comentó al Daily Wire que la nueva fecha límite para que los funcionarios respondan a Kelly «permite al Tribunal, al menos en teoría, emitir algún alivio antes del final del día de puerto seguro».
Fuente: PanamPost