MOSCÚ.- Rusia seguirá avisando con anticipación a Estados Unidos sobre sus ensayos con misiles a pesar de suspender el último tratado nuclear vigente entre los dos países, dijo el vicecanciller ruso Serguéi Ryabkov el jueves.
Con ello, Ryabkov desmintió su propia declaración de la víspera, cuando dijo que Moscú había detenido todos los intercambios de información con Washington que prevé el tratado nuclear Nuevo START de 2011, entre ellos los avisos sobre los ensayos con misiles.
Pero Rusia, que en días pasados indicó que no informaría, ahora tiene la intención de cumplir su promesa del mes pasado de seguir avisando a Estados Unidos sobre los ensayos con misiles, acorde con un pacto entre Washington y la Unión Soviética de 1988.
El presidente ruso Vladimir Putin suspendió la participación del país en Nuevo START el mes pasado porque, según dijo, Rusia no podía permitir inspecciones estadounidenses de sus sitios nucleares cuando Washington y sus aliados de la OTAN han declarado que su meta es la derrota de Rusia en Ucrania.
Moscú subrayó en ese momento que no se retiraba totalmente del pacto y seguiría respetando los límites al armamento nuclear impuestos por el tratado.
Días atrás, Estados Unidos anunció que Moscú y Washington han detenido la mutua información semestral sobre armas nucleares prevista por Nuevo START. Funcionarios en Washington dijeron que Estados Unidos ofreció seguir enviando la información después que Putin suspendió la participación rusa, pero Moscú respondió que no enviaría sus datos.
La interrupción del intercambio de información previsto por el pacto significó un nuevo intento del Kremlin de desalentar a Occidente de elevar su apoyo a Ucrania, destacando el enorme arsenal nuclear de Moscú. El fin de semana pasado, Putin anunció la instalación de armas nucleares tácticas en el territorio de su aliado Bielorrusia.
Juntamente con los datos sobre el estado de sus fuerzas nucleares que los países intercambiaban cada seis meses, los firmantes de Nuevo START también se avisaban mutuamente sobre ensayos con misiles y emplazamientos de sus armas nucleares.
Esos avisos han sido un componente esencial de la estabilidad estratégica durante décadas, al permitir a cada país interpretar correctamente las medidas del otro y asegurarse de que ninguno confunda un ensayo con un ataque.
Ryabkov no quiso aclarar si el acuerdo de 1988 cubría todos los ensayos nucleares sobre los que Rusia estaba obligada a enviar avisos bajo el Nuevo START.