Mamela Fiallo Flor,
Raúl Castro vendaba los ojos y Fidel Castro ataba las manos de los primeros fusilados por la revolución en Cuba, mientras el ‘Che’ Guevara disparaba. De manera que Raúl no “heredó” el poder de la revolución comunista, tras la muerte de su hermano, sino que lo ejerció desde el principio. Hasta hoy el más fiero de los Castro perpetúa el comunismo en Cuba.
Tal como sucedió con Hugo Chávez, Fidel Castro negaba ser socialista al principio de su llegada al poder. De hecho, derrocó al régimen del socialista Fulgencio Batista. Por lo cual, fue retratado como héroe por portales como The New York Times. Curiosamente, fue su hermano Raúl el primero en reunirse con el periodista tan favorable a su revolución: Herbert Matthews.
Una vez que la revolución se demostró abiertamente comunista, persiguió a sus propios soldados que lucharon para poner fin al socialismo, no para consolidarlo. Entre ellos a Huber Matos, que estuvo como comandante revolucionario, luego fue prisionero y finalmente exiliado. El opositor destacó a Raúl Castro por su crueldad y su cultivo de la intriga.
Raúl es más socialista de lo que fue Fidel
El compromiso que tenía Raúl Castro con el socialismo era previo. Es más, fue él quien presentó a Fidel el Che. A diferencia de Fidel, que militó en el Partido Ortodoxo, Raúl Castro, era miembro de la Juventud Socialista desde muy joven. Estuvo afiliado al Partido Socialista Popular, que era el partido comunista cubano en ese momento.
Al cumplir 92 años, Raúl Castro supera la expectativa de vida del cubano promedio (78 años). Asimismo, mientras el salario promedio ronda los 42 dólares mensuales y el mínimo 16, se estima que el dinero del otrora dictador cubano supera los 100 millones de dólares, la novena parte de la fortuna que dejó su hermano al morir.
Guerrillero devenido en militar
Contrario al relato oficial, la revolución no fue heredada por Raúl Castro, tras la muerte de su hermano Fidel, fue parte activa desde el inicio. De hecho, él participó del asalto al Cuartel de Moncada en 1953. También desembarcó del Granma, en 1956, cuando los jóvenes revolucionarios llegaron a bordo de un yate y desde ahí formaron la guerrilla revolucionaria en Sierra Maestra.
Una vez al mando del Estado en 1959, los Castro pasaron de ser guerrilleros a militares. Él asumió cargos de alta responsabilidad en el ejército y desde 1976 se posicionó como sucesor de su hermano Fidel.
Al llegar 1958, Raúl Castro creó el primer servicio de inteligencia revolucionario. Ese mismo año, él impuso el pago de un impuesto a todas las empresas, incluidas las multinacionales de Estados Unidos. Al mes del triunfo de la revolución cubana, en febrero de 1959, reemplaza a Fidel Castro como ministro de las Fuerzas Armadas. Estuvo al mando de las mismas hasta 2008, cuando asumió la presidencia.
Raúl Castro renunció en el peor momento económico del país
Cada 1 de enero, Cuba cumple un aniversario más de la Revolución Cubana. Ya son 63 años bajo el mando del Partido Comunista, el único legal en la isla (los demás son perseguidos). Sin embargo, desde mayo del 2022 que Raúl Castro no ocupa ningún cargo político. Renunció a su puesto como secretario general del Partido Comunista, el rol con más poder.
Y lo hizo nada menos que en la peor crisis económica que vive el país en los últimos 30 años. Los confinamientos por causa del coronavirus causaron un impacto devastador, dado que paralizaron el turismo. De acuerdo, con Reuters, la economía cubana cayó un 11 % en 2020, el mayor desplome desde 1993.
Cuba se alimentó de la esclavitud de sus médicos
Otro duro golpe económico fue la salida masiva de médicos cubanos de Brasil, luego que el presidente Jair Bolsonaro exigió mejorar sus condiciones laborales. Esto incluía que ellos, no el gobierno, reciban su salario de más de 3000 dólares al mes y que puedan viajar con sus familias, en lugar de abandonarlas. Sin embargo, el régimen prefirió perder 33 millones de dólares mensuales que mejorar el bienestar de sus galenos.
Los doctores cubanos que trabajan en el extranjero producen hasta cinco veces más que la industria del turismo. En los más de 50 países donde operan produjeron 11543 millones de dólares anuales en el 2016, en el mismo periodo el turismo produjo 2800 millones de dólares. De manera que la imposibilidad de viajar por causa de la pandemia afectó de varias maneras a la isla.
El país más rico de la región antes de la revolución
Antes de los confinamientos la economía tampoco era buena. Desde la revolución de 1959 venía en bajada. Previo a 1959, Cuba era un 80 % más rica que los demás países iberoamericanos.
Si bien Raul hizo reformas tras la muerte de Fidel, el sistema no cambió y por ende la situación no mejoró. Al contrario, Raul Castro ha logrado perpetuar el comunismo que ha empobrecido a los cubanos por más de medio siglo.
Ahora, aunque supuestamente no está más en funciones, Raúl Castro sigue siendo activo en las decisiones políticas de Cuba. Cuando el pueblo se levantó ante la vista mundial en protesta contra el régimen, en julio del 2021, fue él quien impuso su poderío —luego de mucho tiempo retirado— en la reunión extraordinaria del Buró Político del Partido Comunista Cubano que se celebró al segundo día del levantamiento.
El objetivo era asfixiar e levantamiento popular. Es por ello que cinco días después, participó de un “acto de reafirmación”, en respaldo al Gobierno de Miguel Díaz-Canel. Para recordarle al mundo el poder que ostentan los Castro en la isla, Raúl Castro vistió su uniforme de General de Ejército.
En el mundo libre, los militares se encargan de proteger a la nación de las amenazas externas. En Cuba, su primera función es controlar a la población civil, tanto que los uniformados están a cargo de la economía por medio del Minint, el Ministerio del Interior que a su vez se alimenta de la producción agrícola a cargo de la Unión Militar Agrícola.
Persecución de los homosexuales
Y todo ese aparato se sostiene gracias al servicio militar obligatorio para varones implantado por los comunistas. Empezó en la década de los 60. Excluía a los homosexuales y travestidos (lo cual afectaba a los estudiantes de teatro y danza que por el mero acto de maquillarse eran perseguidos). Debían ir a las Unidades Militares de Ayuda a la Producción, UMAP, donde debían “compensar” con trabajo forzado en el campo su “incapacidad” de incorporarse al Ejército.
Por recomendación de Raúl Castro, el 9 de abril de 1966 visitó la provincia de Camaguey, que tenía la mayor concentración de UMAPs. Desde allí inició una campaña mediática a favor de las UMAP en coordinación con los periodistas locales.
“Academias para producir machos en Cuba”, “‘El trabajo os hará hombres’: Masculinización nacional, trabajo forzado y control social en Cuba durante los años sesenta”, se destacan entre los titulares denunciados por el historiador Abel Sierra.
«Los gulags caribeños de los Castro se llenaron de religiosos y homosexuales para ser reeducados», destaca.
Es que la persecución no era moral sino funcional, utilitario. Quien no “servía” para la revolución, debía ser castigado. En un régimen ateo como propugna el comunismo, los religiosos estaban en cautivero a la par de los homosexuales.
Por eso Sierra acusa un “travestismo de Estado” por parte del régimen. Pues ahora nada menos que la hija de Raúl, Mariela Castro, está a cargo de la cuestión LGBT en la isla por medio de Cenesex, el Centro Nacional de Educación Sexual.
Esto se denomina “pink wash”, la instrumentalización de las personas LGBT para hacer un “lavado de cara”. Lo cierto es que son tolerados en cuanto sirven al régimen. Si son disidentes u opositores, son igualmente perseguidos.
De manera que en junio, denominado el mes del orgullo LGBT, vale recordar que nació Raul Castro, quien ha logrado perpetuar el comunismo en la isla y en los primeros años de la revolució orquestó la propaganda a favor de la persecución e internación en campos de concentración.