WASHINGTON — La amanaza del aumento a las tasas de interés acecha a los estadounidenses. El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, reiteró que no descartan nuevos aumentos, lo que encarecería el crédito a los estadounidenses.
«No dudaremos» en subir las tasas de interés «si es apropiado» para contener la inflación, advirtió Powel.
«Si es apropiado endurecer la política (monetaria) aún más, no dudaremos en hacerlo», dijo durante una conferencia en Washington.
La Reserva Federal anunció el pasado 1 de noviembre que mantenía su tasa de interés de referencia por segunda vez consecutiva, pero dejó la puerta abierta a nuevos aumentos si lo requieren las presiones inflacionarias en los próximos meses.
Meta de reducir la inflación al 2%
La Fed se «compromete» a una política monetaria que permita llevar la inflación a la meta de 2%, sostuvo el titular del banco central.
«Sabemos que los avances hacia nuestro objetivo de 2% (de inflación anual) no están garantizados», señaló Powell.
Las declaraciones de Powell el jueves siguen a la reunión de la Fed en la que sus autoridades decidieron mantener sin cambios las tasas de referencia en máximos en 22 años (5,25-5,50%), por segunda vez consecutiva. Muchos en el mercado consideraron que la decisión muestra que el ciclo de ajustes terminó.
Las declaraciones de Powell sugieren en cambio preocupación sobre la posibilidad de que la inflación deje de moderarse y vuelva a subir.
Según datos de CME Group, los corredores asignan una probabilidad de 90% a la alternativa del statu quo en las tasas en la próxima reunión de la Fed en diciembre.
Créditos más caros
En el comunicado de la Fed del 1 de noviembre indicó que el tumulto reciente en los mercados financieros ha elevado las tasas de interés a largo plazo a su nivel más alto en casi 16 años y contribuido a encarecer el crédito en toda la economía.
“Es probable que las condiciones más ajustadas de créditos para hogares y negocios afecten la actividad económica”, sostuvo la Fed.
Recientemente, funcionarios de la Fed sostuvieron que los rindes —o tasas de interés— más altos del bono de Tesorería a 10 años podría frenar la economía, enfriar la inflación y hacer innecesario un nuevo aumento de la tasa del banco central.
Los rindes del Tesoro a largo plazo han registrado fuertes aumentos desde julio, la última vez que la Fed elevó las tasas, lo que ha incrementado los costos de préstamos para autos, las tarjetas de crédito y muchos tipos de préstamos para negocios. A nivel nacional, la tasa fija promedio a largo plazo para las hipotecas se acerca al 8%, la más alta en 23 años.