MIAMI.- En Venezuela, el régimen de Nicolás Maduro atraviesa su peor momento político, a pesar de los mensajes de fuerza y de dudosas conspiraciones que difunden en pleno año de elecciones, y esto se debe al temor a las consecuencias de sus errores y los más recientes hechos en momentos del “hastio interno” del chavismo, sostiene el analista Pedro Burelli.
“Las conspiraciones con nombres de chiste, los supuestos magnicidios, los arrestos arbitrarios, las degradaciones de oficiales y ahora la desaparición forzosa de la abogada Rocío San Miguel (directora de la ONG Control Ciudadano), y de cuatro miembros de su familia, nos demuestran que lo que Maduro teme es más grave de lo que los venezolanos intuimos. La procesión de veras va por dentro”, escribió Burelli en su cuenta de X, antes Twitter.
Burelli, quien fue miembro de la junta directiva de Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) hasta 1998, analiza la crisis política a la luz de los hechos más recientes y asegura que “a pesar de que algunos comentaristas recomiendan rendirse y convivir con el crimen organizado desde el Estado, la realidad es otra muy distinta”, acotó.
Y refiere el “hastío profundo” que existe dentro del chavismo, particularmente con Maduro, su esposa Cilia Flores y los hermanos Delcy y Jorge Rodríguez, vicepresidenta y ministra de Finanzas y presidente de la Asamblea Nacional, respectivamente.
Errores de Maduro
“Ese hastío tiene particular virulencia en la FAN (Fuerza Armada Nacional) a pesar de estar fragmentada, desmoralizada, y muy criminalizada, la mayoría del componente es profundamente anti-Maduro y su clan”, afirm’o Burelli
Agregó que esto ocurre mientras los cubanos traídos por Maduro al país “trabajan a cambio de petróleo para detectar y neutralizar a cualquier oficial o grupo de ellos que perciban como amenaza”. Esto con la intermediación del ministro de Interior y Justicia.
“La verdad es que ya no dan más y cayeron, los cubanos y sus clientes, en el espiral paranoide que siempre termina implosionando a las tiranías. Ven enemigos por doquier y van por ellos sin orden o lógica”.
Burelli mencionó que a este clima se adiciona el “descalabro de las primarias que ellos permitieron” porque estaban seguros de que María Corina Machado ganaría una elección muy poco concurrida, el 22 de octubre de 2023. “Craso error que han tratado de remendar desde el día después a punta de auto-goles”.
El analista se refirió al referéndum consultivo del 3 de diciembre sobre el Esequibo en el que los militares “fueron testigos de excepción de la ausencia casi total de votantes y también del monstruoso invento de ‘votantes’ por parte del peor CNE de la historia”.
Precisó que la consulta no se hizo para distraer la atención del avasallane resultado de las primarias, “sino para responder a durísimos cuestionamientos dentro de la FAN”.
En riesgo el Esequibo
Burelli afirma que la mayoría de oficiales de la FAN consideran que existe “un alto riesgo de perder el Esequibo por errores que Maduro y Delcy Rodríguez cometieron en la estrategia política y legal que trazaron”.
“Los abogados consultados por la alta oficialidad coincidieron, según varias fuentes, en que se llegó a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), por torpeza y que una vez en La Haya se ha cometido error tras error, por lo que los expertos ven poco probable que la Corte revierta el Laudo Arbitral de 1899”, aseguró el analista político.
Al mismo tiempo, Burelli explicó que Maduro, junto a los hermanos Rodríguez Gómez que son sus principales operadores en la estrategia del Esequibo, se percibe como responsable de la pérdida irreversible de una reclamación histórica.
Esto para muchos oficiales en la FAN es “buena excusa para deslastrarse de Maduro y además culparlo a él y a sus secuaces” de todo lo malo ocurrido desde que Chávez partió a La Habana.
Maduro frente a algo más grave de lo que supone
Burelli asegura que Maduro “está consciente de sus crímenes, sus horrores y sus errores”, por lo que sabría de las consecuencias de estos hechos. “Con razón tiene miedo. Mucho miedo. Miedo que no le permite gobernar, ni dormir, ni pensar en que cada acción represiva es abrir aún más el foso que tiene como destino profundo e ineludible”.
Y añadió: “Estamos en las horas más graves de una involución marcada por horas y días que creímos los peores. No, lo peor está por venir. El miedo se traslada del pueblo a sus verdugos. Hoy quienes se sentían invencibles se ven vencidos. ¿Hasta dónde intentarán llegar para luchar contra la fuerza de la gravedad?