La exfiscal de Guatemala Thelma Aldana se refiere al proceso de nominación de los nuevos miembros de la Corte de Constitucionalidad (CC) que está actualmente en curso. La CC es una pieza clave ya que tiene la última palabra en los juicios más controversiales.
En entrevista con DW, Aldana apela a la comunidad internacional para que defienda los avances que tuvo el país gracias a la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) que duró entre 2006 y 2019. Alemania fue uno de los países financistas importantes de la CICIG.
Deutsche Welle: Señora Aldana, usted ha lanzado un llamado a la comunidad internacional diciendo que está en peligro el Estado de derecho en Guatemala debido a una batalla sobre la nueva composición de la Corte de Constitucionalidad. ¿Qué es exactamente lo que la tiene tan preocupada?
Thelma Aldana: Esta es la batalla final para capturar el Estado guatemalteco en su totalidad. La Fiscal General Consuelo Porras es aliada de la mafia. En la Corte Suprema, de 13 magistrados, 10 están al servicio de la mafia. Han capturado jueces y magistrados de la Corte de Apelaciones. Solamente la Corte de Constitucionalidad se ha mantenido hasta ahora al margen de la mafia, lo que es un logro extraordinario.
¿Cuántos puestos están en juego en la Corte de Constitucionalidad, y cómo vamos?
Son cinco titulares y cinco suplentes y nos llevan cinco a uno. Los dos electos por el Congreso son de la mafia, dos nombrados por el Colegio de Abogados son de la mafia, un suplente de la Universidad de San Carlos es de la mafia, y solo la titular, Gloria Porras, es defensora del Estado de derecho. Pero a Gloria Porras le van a iniciar un proceso inventado, al estilo de lo que hacen en Guatemala, e hicieron conmigo también para impedir mi candidatura presidencial. La Fiscal o la Corte o los jueces inventan casos para quitarnos del camino, incluso para mandar a uno a prisión, y que lo maten allí. Eso lo querían hacer conmigo.
¿Quiénes son la mafia en Guatemala?
En Guatemala hay una alianza criminal difícil de explicar. Son grupos corporativos mafiosos que utilizan a los diputados del Congreso, que son los que dan la cara. Allí está (el primer secretario del Congreso, sancionado por Estados Unidos por «corrupción significativa”) Felipe Alejos, el presidente actual del Congreso, y como 80 diputados que son delincuentes y aliados del narcotráfico.
El mismo Presidente de la Republica es un aliado de las fuerzas oscuras. La Fiscal Porras, desde que se instaló, fue una figura del entonces Presidente Jimmy Morales en su batalla contra la CICIG. Pero arriba de ellos hay grupos muy poderosos, donde se mezclan algunos empresarios, altos mandos del Ejército -especialmente en retiro-, que luchan por el statu quo y por mantener a Guatemala como su finca, viviendo como en época feudal. Y hay una mezcla con el narcotráfico. Los partidos políticos son lel moño del regalo, capturados por la mafia a través del financiamiento ilícito de sus campañas. Con millones de dólares que no se declaran al Tribunal Supremo Electoral, se captura a los candidatos. Cuando llegan a la presidencia están al servicio de la mafia que los financió. Guatemala tiene décadas de estar así.
Thelma Aldana: «Los partidos políticos están capturados».
¿Que falló en la lucha por el Estado de derecho? ¿Cometió la CICIG algún error que selló su final al ser expulsada del país por Jimmy Morales en 2019? Sobreestimó sus fuerzas?
La CICIG hizo todo lo que pudo. Lo que nos falló fue el apoyo internacional en los últimos cuatro años. Durante el conflicto armado interno, los militares hicieron planes estratégicos contrainsurgentes, los cumplieron y ganaron la guerra. Lo mismo hicieron luego contra la CICIG, paso a paso. Primero sacaron al comisionado de la CICIG, Iván Velásquez, intentaron meterme presa a mí, destrozaron al Ministerio Público. Ahora estamos en el paso más importante, que es capturar la CC, porque es la instancia última del ordenamiento jurídico guatemalteco.
Es evidente que el gobierno de Estados Unidos bajo Donald Trump se alineó con el gobierno de Jimmy Morales en contra la CICIG. ¿Pero también la Unión Europea falló?
Es que Estados Unidos marca el paso y alinea a los demás países. La Unión Europea tiene su propria agenda y cooperación, pero se necesitaba más fuerza. Son muy respetuosos en su diplomacia. Pero en un enfrentamiento con la mafia, la diplomacia no basta. En Guatemala, la mafia está ganando la guerra.
Ahora que hay un nuevo gobierno en EE. UU., ¿tiene esperanza de que esto cambie? ¿Está en contacto con funcionarios de Joe Biden?
Si, mantenemos comunicación con algunos funcionarios actuales y también anteriores. Yo siento que hay mucho más apoyo ahora, pero incluso antes hubo apoyo de algunos funcionarios. Pero insisto en que hace falta fuerza, porque Guatemala le perdió el respeto a Washington y a la UE.
¿Que podría hacer la comunidad internacional, que tipo de sanciones funcionarían?
Si Alemania, por ejemplo, se sentara con los empresarios guatemaltecos y les dijera: «Salgan inmediatamente a ver cómo se rescata la CC, o los negocios van a sufrir». Cuando hay negocios de por medio, lo piensan.
¿Pero qué se puede hacer desde afuera si los mismos guatemaltecos eligen una y otra vez a representantes de la mafia?
No es así. Los partidos políticos están capturados. Por eso yo me metí, sabiendo que había que hacerlo para tener una alternativa. En las encuestas vi que iba en los primeros lugares, encontré en el Movimiento Semilla un buen partido, y el mismo día que hicimos nuestra asamblea, los mafiosos se asustaron y me sacan una orden de captura.
El otro candidato del narcotráfico, Mario Estrada, arma un atentado en mi contra, y me dice la DEA (oficina estadounidense de lucha contra el narcotráfico): «Salga de Guatemala porque la van a matar». Salgo, y los guatemaltecos se quedan sin candidato. Y la mafia empiezan a financiar dos candidatos para que vayan a segunda vuelta. Así engañan a los votantes. Saben que cualquiera de los dos será a su servicio. Y no fue solo el último proceso electoral, así fue el anterior y el anterior. Guatemala siempre vota por dos delincuentes en segunda vuelta. No nos dejan votar por verdaderos candidatos que podrían cambiar el destino de ese país.
Fuente: DW