“Esto afecta a la empresa estadounidense Chevron, que tiene una participación del 60 % en el campo Loran -el 40 % restante es de Pdvsa- para participar en el desarrollo del campo Loran-Manatee”, aclaró el funcionario.
En cuanto al campo de Manatee, Shell Trinidad y Tobago controla el 100 % del área.
“Como consecuencia de todo ello el Gobierno de Trinidad y Tobago y de Venezuela han acordado el desarrollo independiente en el área transfronteriza Loran-Manatí, cada uno dentro de su área marítima”, matizó Rowley.
El campo de gas Loran-Manatee se extiende a ambos lados de la frontera marítima entre Trinidad y Tobago y Venezuela.
Se calcula que alberga 10,2 billones de pies cúbicos (TCF) de gas de los cuales aproximadamente el 74 % pertenece a Venezuela y el 26 % restante pertenece a Trinidad y Tobago.
Según Rowley, Shell está conversando con el Gobierno y está trabajando en varios escenarios de desarrollo para determinar la mejor opción.
“Este importante cambio de político proporciona un fácil acceso al mercado para todo el gas de estos campos, si las circunstancias lo permiten y los propietarios lo desean”, dijo.
Rowley señaló además, que el sector de la energía en su país debe aumentar más y que la producción de petróleo aumentará en el futuro, con un crecimiento estimado de 90.000 barriles por día para 2022.
Fuente: El Carabobeño