MANCHESTER- Donald Trump busca asegurarse este martes en New Hampshire la nominación republicana a las presidenciales de Estados Unidos en las que Nikki Haley es su único obstáculo en la carrera, luego de la sorpresiva retirada del gobernador de Florida, Ron DeSantis.
El gobernador de Florida era el mejor posicionado en la disputa frente a Trump, pero la ventaja era de más de 50 puntos en todas las encuestas y después de su derrota en Iowa decidió retirarse de la contienda electoral o era un acuerdo preplanficado dentro del Partido Republicano.
Después del atronador triunfo en el caucus de Iowa como inicio de las primarias, Trump se encamina en New Hampshire a otra inminente victoria sobre su único rival: la exembajadora de EEUU en Naciones Unidas durante el mandato del expresidente.
Pero Haley, según las encuestas, no ha podido acercarse al expresidente ni en Carolina del Sur, donde fue gobernadora del 2011 al 2017. En ese estado, su estado, Trump le gana por más de 15 puntos.
Encuestas anuncian la próxima victoria de Trump
Según una encuesta de CNN, de acentuada tendencia de izquierda, Trump tiene en New Hampshire el 50% de los votos, mientras que Haley cuenta con un 39%, supuestamente.
En las últimos semanas, los grandes medios de izquierda y de extrema izquierda en EEUU buscan mover el estado de opinión a favor de Haley, pero la ventaja de Trump ha resultado inalcanzable en todas las encuestas que mantenían hasta ahora a Haley detrás de DeSantis.
Más que apoyo, las televisoras lo que buscan es «raitings» de audiencia durante temporadas electorales y extender las primarias con cierta motivación para crear un rival «fuerte» contra Trump, cuando en realidad Haley no ha podido ir al frente ni en su propio estado.
El calendario para la nominación de Trump como rival del presidente Joe Biden en las elecciones de noviembre podría acelerarse en New Hampshire (noreste).
El expresidente obtuvo una contundente victoria ante DeSantis en Iowa la semana pasada, con Haley en tercer lugar, y hasta ahora ningún candidato ha fallado en obtener la nominación republicana tras ganar las internas de los primeros dos estados.
Esto hace de New Hampshire un todo o nada para Haley, quien fuera embajadora ante la ONU en el gobierno de Trump, y que va por detrás de su antiguo jefe en todas las encuestas.
Haley, la rival fabricada por la prensa
En una nueva encuesta del Washington Post/Monmouth del lunes Trump cuenta con el respaldo del 52% en New Hampshire, frente al 34% de Haley.
«Porque tenemos políticas similares, con fronteras fuertes, buena educación, impuestos bajos, muy muy pocas regulaciones, tan pocas como sea posible, cosas de las que (Haley) realmente no habla, porque ella es una globalista», dijo Trump entre aplausos en su sede de campaña en Manchester.
«Sencillamente no está al mismo nivel que en 2016. Pero más que eso, lo que diré se centra en el hecho de que sin importar de que se trate, el caos lo persigue», dijo a CBS.
Con DeSantis fuera de la carrera, Haley busca apoyo entre los independientes de New Hampshire -a quienes se les permite votar en las primarias de ambos partidos y normalmente optan por candidatos más moderados- para confirmar lo que algunos analistas han descrito como su «última resistencia».
Pero será cuesta arriba, al tener en promedio más de 15 puntos de desventaja frente a Trump en las encuestas de RealClearPolitics y FiveThirtyEight, y cuando está en un aparente estancamiento.
Habría que ver si la exgobernadora logra llegar a las primarias en su estado natal, Carolina del Sur, a finales de febrero.
Este estado del noreste es un pequeño premio en una larga carrera, ya que asigna sólo 22 de los 2.429 delegados que designarán oficialmente al candidato republicano en Milwaukee en julio.
Pero es un indicador fiable a nivel nacional y se considera que marca pautas para las próximas primarias. No obstante, el nivel alcanzado por Haley ha sido más por los medios de prensa que por el verdadero respaldo popular.
El supermartes de marzo
La votación del llamado «supermartes» del 5 de marzo, con 874 delegados sobre la mesa, puede hacer que un candidato alcance las tres cuartas partes del total requerido para la nominación.
Los asesores de Trump apuestan por estar en condiciones de liquidar la carrera una semana después y quieren que finalice en abril.
Los demócratas celebran sus propias primarias en New Hampshire el mismo día que los republicanos, pero Biden no figurará en la lista de candidatos debido a una disputa sobre el calendario electoral entre funcionarios locales y el Partido Demócrata.
A pesar de ello sus seguidores animan a escribir su nombre en la papeleta y votar por él en vez de por el congresista de Minnesota Dean Phillips o la autora de libros de autoayuda Marianne Williamson.
Como mismo se da por sentada la nominación de Biden, igual ocurre con la de Donald Trump, pero los medios de prensa siempre contrarios al camino del exmandatario republicano hacen intentan hacer creer que le costaría trabajo ganar, algo absolutamente falso, pero que la prensa necesita como alimento para convertirlo en dinero de publicidad y subir los niveles de audiencia.
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