El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentó oficialmente el plan de tres fases para reabrir la economía estadounidense ante la pandemia de COVID-19 y dijo que esto se realizará “paso a paso”.
El plan, presentado este jueves en compañía del equipo de respuesta al Covid-19 de la Casa Blanca, recomienda a los gobernadores que antes de avanzar hacia la reapertura de los estados y levantar órdenes de distanciamiento, observen una trayectoria descendente en el número de casos de Covid-19 durante un periodo de 14 días.
El presidente enfatizó que “los gobernadores tendrán el poder de adaptar un enfoque que satisfaga las diversas circunstancias de sus estados”, por lo cual el plan presentado es una guía de pautas. Esto representa un significativo cambio de discurso de Trump con respecto de días anteriores, cuando reclamó la “autoridad total” para reabrir los estados.
Durante la conferencia de prensa, se observó que el plan incluye dos aspectos a considerar en la reapertura de estados: consolidar sistemas de pruebas rápidas y eficientes, y de rastreo de contactos de COVID-19. Estas medidas han sido demandadas por expertos en salud pública, aunque no se detallaron acciones específicas para lograrlas.
Las pautas también recomiendan que antes de avanzar hacia la primera fase de reapertura, los estados se aseguren de que los hospitales pueden tratar a todos los pacientes y asegurar las medidas de protección adecuadas para trabajadores de salud.
El equipo del presidente insistió en que trabaja por aumentar la capacidad de aplicar pruebas de COVID-19 y la doctora Deborah Birx, coordinadora del grupo de respuesta de la Casa Blanca, sugirió que se tiene la meta de lograr un millón de pruebas más a la semana y de reforzar la identificación de casos asintomáticos.
Las fases del plan
Birx también explicó las fases del plan, las cuales incluyen recomendaciones para los gobernadores, empleadores, trabajadores y ciudadanía en general.
La primera fase permite a ciertos tipos de negocios y empresas reabrir, como restaurantes y gimnasios, aunque llama a privilegiar el trabajo a distancia, evitar reuniones de más de 10 personas y que la población más vulnerable al coronavirus permanezca en casa.
En una segunda fase, los viajes no esenciales pueden reanudarse y las escuelas reabrir, aunque se recomienda continuar fomentando el trabajo remoto y la distancia social, así como evitar reuniones de más de 50 personas y que la población vulnerable permanezca en refugio.
Para la tercera fase, se recomienda a los estados tener evidencia de que no ha habido repuntes de casos o muertes por COVID-19, con lo cual las actividades pueden regresar a la normalidad, aunque se alienta a las personas a conservar medidas de distanciamiento social e higiene.
Por su parte, el doctor Anthony Fauci dijo que “el juego no está ganado”, pese a que haya estados que cumplan con los criterios para la reapertura. “Sin importar en qué fase estemos, tendremos que protegernos”, dijo el epidemiólogo de la Casa Blanca.
Fauci también enfatizó que al centro del plan está la seguridad y salud de los ciudadanos estadounidenses y que antes de avanzar de una fase a otra, los estados deberían asegurarse cada vez de que no haya repuntes en la infección.
Trump dijo que no intenta hacer campaña con el plan de reapertura económica, aunque el título del documento es “Reabrir América de nuevo”, una frase muy similar a su lema de campaña. También mencionó que el pueblo de Estados Unidos “está listo para demostrar que los americanos pueden enfrentar cualquier reto que se les presente”.
Fuente: Forbes México