El gobierno de Estados Unidos, encabezado por Donald Trump, dio a conocer el jueves un decreto que prohíbe las inversiones estadounidenses en empresas chinas que -según Washington- son propiedad o están controladas por el Ejército chino, elevando la presión sobre Beijing tras las elecciones presidenciales.
La medida, que fue reportada en exclusiva por Reuters más temprano el jueves, podría afectar a algunos gigantes chinos como las firmas de telecomunicaciones China Telecom Corp, China Mobile y el fabricante de equipos de vigilancia Hikvision.
A partir del 11 de enero, la orden presidencial prohibiría cualquier transacción de personas estadounidenses en activos de 31 empresas chinas que están desde este año en una lista del Departamento de Defensa por sus nexos con el ejército chino.
Se trata de dos listas, una inicial del 12 de junio y una segunda complementaria de agosto pasado. En la primera aparecen firmas como Huawei, Aero Engine Corporation of China o China Railway Construction Corporation. Mientras que en la segunda también se nombra a China Communications Construction Company y China Nuclear Engineering & Construction Corporation.
En el decreto, Trump dijo que encontró que China está “explotando cada vez más el capital estadounidense para sus propios recursos y permitir el desarrollo y modernización de sus aparatos militares, de inteligencia y seguridad, lo que continúa permitiendo que amenace directamente al territorio de Estados Unidos y sus fuerzas en el extranjero”.
La decisión muestra que Trump, quien fue derrotado por el demócrata Joe Biden en las elecciones del 3 de noviembre, está buscando aprovechar sus últimos meses en la Casa Blanca para aumentar la presión sobre el gobierno chino.
Es probable que el decreto tense aún más los lazos entre las dos principales economías del mundo, enfrentadas por temas comerciales, el manejo chino de la pandemia de coronavirus y sus medidas en Hong Kong.
Fuente: Forbes México