El fiscal especial David Weiss ha confirmado que el Departamento de Justicia de Estados Unidos pretende imputar antes de que acabe septiembre a Hunter Biden, hijo del presidente del país, Joe Biden, por un delito de posesión de armas.
«El juicio rápido requiere que el Gobierno obtenga una acusación por parte de un gran jurado antes del viernes 29 de septiembre de 2023 como pronto», ha declarado Weiss en un comunicado publicado por la cadena estadounidense CNN.
«El Gobierno tiene la intención de solicitar la presentación de una acusación en este caso antes de esa fecha», reza la misiva.
Hunter Biden mintió al Departamento de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, lo que supone un delito federal, cuando en 2018 realizó la compra de un revólver y juró no estar consumiendo ni ser un adicto a alguna droga ilegal a pesar de su adicción al crack por aquel entonces.
El hijo del presidente se declaró culpable en junio de una serie de delitos menores por irregularidades en su declaración de la renta, entre ellos el impago de impuestos, y que en un principio le habría servido para archivar su causa por posesión de armas.
Sin embargo, la jueza de distrito de Delawere Maryellen Noreika rechazó el pacto entre Hunter Biden y el Departamento de Justicia por ser «inusual», pues resolvía el asunto de la posesión de armas con un programa de desviación, una suerte de programa de rehabilitación para remediar el comportamiento delictivo.
Cabe destacar que el fiscal David Weiss fue nominado en 2017 por el entonces presidente, Donald Trump, y ratificado por el Senado republicano un año después. Con la nominación de Weiss, la Administración federal querría despejar todas las dudas sobre cualquier acusación de partidismo en favor del hijo de Biden.