«Compro, compro, compro». Los comerciantes informales de Caracas anuncian así un producto nuevo, acaso el más buscado de Venezuela: el dólar. Al contrario de lo que se pudiera pensar, la divisa estadounidense, a pie de calle, tampoco está exenta de las distorsiones en el único país del mundo en el que se cambia por 80 centavos (o menos).
«Ahorita, que la tasa está en 1.480, el dólar se compra en 1.000 bolívares», explica a Efe Pablo, nombre ficticio de un vendedor informal que prefiere mantenerse en el anonimato.
Fuente: EFE