CIUDAD DE GUATEMALA.- El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, advirtió este martes que Washington sancionará a quienes faciliten la «migración irregular», tema clave en la campaña electoral estadounidense, y anunció 578 millones de dólares en ayuda para América Latina, en una conferencia continental en Guatemala.
Esta medida se enmarca en los esfuerzos por abordar la crisis migratoria que afecta a la región, siendo uno de los temas cruciales en la agenda política estadounidense en tiempos de campaña electoral y cuando el actual inquilino de la Casa Blanca, el demócrata Joe Biden, busca la reelección presidencial.
Blinken prometió en el cónclave de Guatemala «578 millones [de dólares] en asistencia humanitaria» a la región, informó Marcela Escobari, asistente especial de Biden, en una rueda de prensa telefónica.
Estos fondos se destinarán a «los países socios [en el esfuerzo por una migración legal y ordenada] y las comunidades de acogida [de migrantes] en la respuesta a necesidades humanitarias urgentes», indicó la Casa Blanca en un comunicado.
La «nueva política de restricción de visas está dirigida a personas que, a sabiendas, brindan transporte a quienes pretenden migrar irregularmente a Estados Unidos, incluidos los vuelos chárter que llegan a Nicaragua», dijo Blinken en el encuentro presidido por el mandatario guatemalteco, Bernardo Arévalo.
Blinken destacó que el lunes Washington anunció «restricciones de visas a ejecutivos de empresas colombianas de migración marítima que están facilitando la migración irregular».
«Gestión humana»
La conferencia, presidida por Arévalo, reunió a representantes de una veintena de países americanos para buscar soluciones concertadas a la compleja problemática migratoria en el continente. En este contexto, Blinken destacó la importancia de reforzar la gestión humana de la migración y de adoptar medidas para «combatir» la migración irregular.
«Estamos redoblando nuestros esfuerzos para proteger a los trabajadores migrantes de la explotación», agregó el secretario de Estado de Estados Unidos.
Por su parte, la vicecanciller chilena, Gloria de la Fuente, sostuvo que la migración es un desafío multilateral y, por lo tanto, los países deben encontrar soluciones conjuntas.
«Esperamos que podamos concertar una hoja de ruta de implementación de la Declaración de Los Ángeles, relevando los procesos ya existentes», añadió De la Fuente.
Blinken y Mulino hablan sobre migración
El Secretario de Estado y el presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, abordaron este martes sobre la «importancia de trabajar juntos para gestionar la migración de forma segura y humana». Blinken subrayó durante una llamada telefónica «el fuerte apoyo» de Washington a «los esfuerzos de Panamá para hacer frente a la corrupción y el crimen organizado», expresando su «compromiso» para «asegurar el éxito continuo del Canal de Panamá», así como la mejora de la resiliencia del mismo al cambio climático.
Ambos afirmanron que la cooperación bilateral es «esencial para asegurar el desarrollo económico y la prosperidad futura de la región», según reza un comunicado del portavoz del jefe de la diplomacia estadounidense, Matthew Miller.
El secretario de Estado destacó que la relación bilateral «ha florecido durante más de 100 años, respaldada por fuertes vínculos económicos, educativos y familiares», y que «de cara al futuro» seguirá trabajando en «objetivos comunes de crecimiento económico inclusivo y sostenible, reforzando la seguridad ciudadana y frenando la migración irregular».
Millones ingresan
La medida anunciada por Blinken se produce en un momento en que el presidente estadounidense Joe Biden enfrenta una creciente presión electoral debido a la crisis migratoria. Desde que asumió el cargo, aproximadamente 10 millones de migrantes indocumentados han sido detenidos en la frontera, generando tensiones tanto a nivel político como social en Estados Unidos.
Además, la situación en la región se ve complicada por la migración a través del peligroso territorio del Darién, fronterizo entre Colombia y Panamá, donde bandas criminales operan asaltando, violando y matando a los migrantes. También se observa un aumento en los vuelos chárter desde Nicaragua, que se ha convertido en un puente aéreo para migrantes asiáticos y africanos que buscan llegar a América Central y evitar el Darién.
La política migratoria del gobierno de Biden ha sido objeto de críticas por parte de los republicanos y de sectores de su propio partido, quienes lo acusan de inacción frente al problema. En este contexto, se espera que Biden busque implementar medidas más contundentes para abordar el caos migratorio y asegurar su reelección en las próximas elecciones.
La manifestación reciente en Boston, Massachusetts, donde cientos de personas exigieron el cierre de la frontera y un cambio en las políticas migratorias de Biden, refleja la creciente preocupación entre la población estadounidense. Esta presión interna, junto con las demandas de una respuesta efectiva por parte de los países latinoamericanos, subraya la urgencia de encontrar soluciones concretas y colaborativas para hacer frente a la crisis migratoria en la región.