Luego de una jornada marcada por los retrasos o cierres de centros de votación (casillas, como se le conoce comúnmente en México), el país escogió a su nueva presidente: Claudia Sheinbaum, la elegida de Andrés Manuel López Obrador para representar al partido Morena, y quien garantizará la continuidad de su proyecto de la “cuarta transformación”, luego de que los resultados preliminares muestren que duplica la cantidad de votos que recibió su principal contendiente, Xóchitl Gálvez, del frente opositor Fuerza y Corazón por México.
Las encuestas avizoraban lo que sucedería. Como resultado, el país no verá grandes cambios ya que en esencia, las propuestas de la favorita de AMLO no plantean nada distinto frente a la necesidad urgente de seguridad y de control de la migración irregular que exigen sus habitantes.
Jorge Álvarez Máynez, del opositor Movimiento Ciudadano (MC), era otro candidato que, sin posibilidad alguna de ganar la Presidencia, compitió este 2 de junio a pesar de que sobre él pesaron las sospechas de querer dividir al electorado frente a la opción de Xóchitl Gálvez. El conteo que ofrece el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) lo mantiene en un muy alejado tercer lugar tras estas elecciones, donde fueron convocados alrededor de 98 millones de votantes para más de 20000 cargos. La jornada que terminó este domingo, fue considerada la mayor elección en la historia del país.
Retrasos y asesinatos en centros electorales
Puede que los números preliminares estén siendo publicados, pero solo quedarán oficializados con el cómputo definitivo que hace el Instituto Nacional Electoral (INE) el miércoles posterior al día de la elección. Es decir, el próximo 5 de junio, aunque se trata más de una formalidad, ya que el futuro de México está definido y contará con AMLO a las sombras del poder los próximos seis años a través de la futura presidente, quien llegó a la nominación al ser escogida a dedo en la coalición oficialista.
En general, fue un día donde se reportaron retrasos y hasta dos muertos por tiroteos en centros de votación en Puebla, estado del centro de México. Un saldo lamentable, mas no diferente a lo que venía sucediendo en campaña. El Gobierno reconoció el asesinato de 22 aspirantes días antes de los comicios, pero algunas organizaciones independientes estimaron más. Sin mencionar que el INE admitió que 222 mesas de votación no abrirían por problemas de seguridad, especialmente en los estados de Chiapas, con 108 centros, y Michoacán, con 84.
Transcurrían cuatro horas de iniciada la jornada de votación cuando más del 12 % de las casillas no habían iniciado actividades dentro del país. No hubo mayores explicaciones oficiales, pero es posible que la situación de los 20 consulados en Estados Unidos arrojara la respuesta: problemas técnicos por el recién estrenado sistema electrónico, con tabletas como la única opción para votar, lo que ralentizó el proceso, según un reporte de la agencia EFE. Al menos en un consulado ubicado en Washington, 1000 personas esperaban para votar en algunas de las cinco máquinas y algunos, no pudieron hacerlo.
Sin embargo, de los 170.182 centros de votación aprobados, el INE finalmente reportó la instalación de 169.884. Es decir, el 99,98 %. Con esa maquinaria electoral, y bajo un ambiente marcado por la violencia desde que comenzó la campaña electoral, Claudia Sheinbaum se convertirá en la primera mujer presidente de México, aunque con el fantasma de la gestión de AMLO a cuestas.