WASHINGTON.- Un destacamento naval ruso, que incluye al submarino de propulsión nuclear Kazan, visitará Cuba la próxima semana, anunció el jueves el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (Minfar).
Según el régimen castrista, los navíos no portan armas atómicas y no representan una «amenaza para la región».
Estados Unidos rastrea embarcaciones y aeronaves de combate rusas que se tiene previsto que lleguen en las próximas semanas al Caribe, supuestamente para un ejercicio militar, según informaron funcionarios estadounidenses.
Las maniobras serían un despliegue de fuerza por parte de Rusia en momentos en que se intensifican las tensiones en torno al apoyo militar de Occidente a Ucrania.
Se tiene previsto que las embarcaciones hagan posibles escalas en puertos de Venezuela y Cuba, mientras Rusia establece una presencia militar en el hemisferio occidental que, según altos funcionarios del gobierno del presidente Joe Biden, era de llamar la atención pero no preocupante.
Las maniobras, que serán seguidas de cerca por el ejército de Estados Unidos, incluirán un “puñado” de buques rusos y embarcaciones de apoyo, dijeron los dos funcionarios.
En tanto, el Ministerio de Exteriores de Cuba informó este jueves que tres buques y un submarino de la Marina rusa atracarán en el puerto de La Habana entre el 12 y el 17 de junio, una visita que «no representa amenazas» para la región caribeña, ya que «ninguno de los navíos es portador de armas nucleares», según el régimen.
«Esta visita se corresponde con las históricas relaciones de amistad entre Cuba y la Federación de Rusia y se acoge estrictamente a las regulaciones internacionales de las cuales Cuba es Estado Parte», indicó el Ministerio en un comunicado.
La comitiva estará formada por la fragata Gorshkov, el submarino de propulsión nuclear Kazan, el petrolero Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chiker.
Medidas asimétricas
No es la primera vez que Rusia envía barcos al Caribe. Sin embargo, este ejercicio se lleva a cabo mientras el presidente ruso Vladímir Putin ha insinuado que Moscú podría tomar “medidas asimétricas” en otras partes del mundo en respuesta a la decisión de Biden de permitir que Ucrania use armas proporcionadas por Estados Unidos para lanzar ataques dentro de territorio ruso con el objetivo de proteger a Járkiv, la segunda ciudad más grande de Ucrania.
Los funcionarios dijeron que el ejercicio «sin duda” es parte de una respuesta rusa más amplia al apoyo de Estados Unidos a Ucrania, pero también es un intento de Putin por demostrar que su marina todavía es capaz de proyectar poderío global después de perder varias embarcaciones en ataques ucranianos.
Funcionarios militares ucranianos dijeron en marzo que Rusia había perdido una tercera parte de su flota del mar Negro a causa de ataques ucranianos durante los últimos dos años de guerra.
Rusia no notificó a Estados Unidos sobre las próximas maniobras, pero la Marina estadounidense ha estado rastreando los movimientos de estas embarcaciones, dijeron los funcionarios.
A pesar de que Rusia no notificó a Estados Unidos -lo que los países suelen hacer para evitar malentendidos- los funcionarios dijeron que los ejércitos de todo el mundo tienen el derecho a realizar maniobras en aguas internacionales y lo hacen regularmente. Unos 20 países de la OTAN. incluido Estados Unidos, darán inicio al BALTOPS 24, un importante ejercicio naval y aéreo en la región del Báltico cerca de Rusia a partir del viernes.
Los funcionarios dijeron que esperan que los barcos rusos permanezcan en la región durante todo el verano y probablemente realicen ejercicios similares de seguimiento en el Caribe después de concluir con estas maniobras.
Los funcionarios dijeron que el Congreso fue notificado el miércoles sobre los próximos ejercicios militares rusos