El presidente colombiano, Iván Duque, anunció este lunes que el 1 de septiembre culminará la cuarentena general decretada para combatir la pandemia de la COVID-19, vigente desde el 25 de marzo, y que el país entrará en una fase de aislamiento “selectivo”.
“Empieza una nueva fase en la que cambiamos el concepto de aislamiento obligatorio, con un número importante de excepciones, a que tengamos un concepto de aislamiento selectivo, de distanciamiento y responsabilidad individual”, dijo el mandatario en su programa diario sobre las medidas contra la pandemia.
La cuarentena en Colombia, que mañana cumplirá cinco meses, tuvo una duración inicial de dos semanas que el Gobierno fue prolongando de manera consecutiva ante el avance imparable de la COVID-19.
Duque explicó que en esta “nueva fase” el país no se regirá por “excepciones” sino por “restricciones puntuales” a los “eventos y aglomeraciones”, entre otras actividades.
“Seguiremos avanzando en la apertura de sectores con los protocolos que han sido establecidos por el Ministerio de Salud con los demás Ministerios. Estaremos operando con mayor velocidad en municipios sin afectación y de baja afectación, avanzando en los pilotos (de reapertura)”, expresó el jefe de Estado.
Esta nueva fase, añadió, irá hasta finales de septiembre “con la idea de ir monitoreando diariamente los indicadores y el comportamiento de la pandemia” para tomar nuevas decisiones.
El ministro de Salud, Fernando Ruiz, aclaró que pese a esto el país se mantendrá en emergencia sanitaria hasta el 30 de noviembre.
En Colombia hay 551.696 casos de COVID-19, de los cuales 148.807 están activos, mientras que 384.171 pacientes se recuperaron y 17.612 fallecieron.
Terminan cuarentenas estrictas en Bogotá
Además del anuncio de Duque, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, afirmó que a la medianoche de este miércoles terminarán en la capital colombiana las cuarentenas estrictas que han estado vigentes por localidades de la ciudad y que estaba previsto que acabaran el domingo 30.
“Si no hubiéramos hecho nada, si no hubiéramos tomado medidas en su momento, en Bogotá hubiera podido haber hasta 40.000 fallecidos por la pandemia”, afirmó en una rueda de prensa la alcaldesa de la capital colombiana, donde hay 192.654 casos de COVID-19 y han muerto 5.008 personas.
Desde el 16 de agosto, alrededor de 1,2 millones de personas que habitan las localidades de Usaquén, Chapinero, Santa Fe, La Candelaria, Teusaquillo, Puente Aranda y Antonio Nariño estaban en cuarentena estricta.
Durante esos días de aislamiento los habitantes de esas zonas solo pueden salir a actividades estrictamente necesarias.
Pese a la terminación anticipada de esas cuarentenas, López aseguró que “es imposible volver a las actividades al 100 %” y que no todo el mundo podrá salir a las calles al mismo tiempo.
Las cuarentenas estrictas provocaron manifestaciones en diferentes zonas de la ciudad en las últimas semanas, pues los comerciantes y trabajadores del aeropuerto y del sector turístico en general protestan a diario para pedir que se les permita trabajar para evitar la quiebra.
En la manifestación de hoy, comerciantes del norte de la ciudad bloquearon uno de los carriles de la carrera Séptima, una de las principales de la ciudad, para pedir al Gobierno que les permita reabrir sus negocios.
“Señores del Gobierno basta ya de prohibir, es hora de aprender a Covid-vir. Todos los habitantes del mundo tenemos que aprender a convivir con el virus”, rezaba una pancarta que cargaban dos comerciantes que vestían de negro en alusión a que están “de luto” por la compleja situación que viven.
Fuente: Efecto Cocuyo