El presidente de Argentina, Javier Milei, está de vuelta en tierras suramericanas, tras un fin de semana marcado por polémicas debido a su viaje a España y la intervención que sostuvo durante la conferencia conservadora más grande del país europeo, es decir “Europa Viva 2024”, cuyo anfitrión era el partido Vox. Este evento contó con la presencia de grandes líderes europeos de la talla de Giorgia Meloni y Viktor Orbán.
Fiel a su estilo irreverente en redes sociales, el mandatario se expidió con un particular saludo a través de X, su plataforma preferida para dirigirse a sus seguidores… y detractores también: “Hola a todos…!!! Volvió el león, surfeando sobre una ola de lágrimas socialistas… Viva la libertad carajo”. Sus primeras palabras, una vez que se encontraba en territorio argentino.
Esta particular visita a España por parte de Milei fue convulsa de inicio a fin. En primer lugar, el mandatario pisa estas tierras luego de un impasse, que no pasó a mayores, producto de unas declaraciones irresponsables por parte del ministro de Transportes, Óscar Puente, quien acusó al presidente argentino de “ingerir sustancias”. El exabrupto del funcionario fue durante un acto del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
Ahora, en medio de su discurso en la “Viva 24”, se dio una respuesta a esta serie de ataques que iniciaron con un Pedro Sánchez incisivo incluso antes de que Milei asumiera la Presidencia. Es más, el ministro del Interior de Milei, Guillermo Francos, recordó en declaraciones a medios locales que en la campaña electoral Sánchez se pronunció en favor del candidato presidencial peronista Sergio Massa, como queda documentado, a continuación:
En tal sentido, el Gobierno de Milei indicó que no pedirá disculpas al Ejecutivo español, después de que el mandatario arremetiera contra el socialismo en el acto de Vox, calificara de “calaña” a Sánchez y tildara a su esposa, Begoña Gómez, de “corrupta”. Es necesario recordar que el presidente del Gobierno español estuvo cerca de dimitir por estas acusaciones hacia su mujer, que aún hoy siguen bajo la lupa.
Según la agencia española EFE, a causa de estas manifestaciones de Milei, el Ejecutivo español llamó a consultas ‘sine die’ a su embajadora en Buenos Aires, María Jesús Alonso, y exhortó al economista libertario a pedir “disculpas públicas”. A su vez, el Ministerio de Asuntos Exteriores español convocó al embajador argentino en Madrid, Roberto Sebastián Bosch, para pedir que se disculpe por las palabras del presidente.
Sin embargo, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, también recordó y publicó en redes sociales que el mandatario argentino fue tratado “de odiador, de negacionista, de ‘ingerir sustancias’, de autoritario, de anti-democrático y de ser gente ‘muy mala’” por parte de ministros españoles.