El acto fue convocado con motivo del “Día de la militancia” que celebran los peronistas cada 17 de noviembre en conmemoración del regreso del líder y fundador del partido, Juan Domingo Perón, al país en 1972 tras 18 años de exilio.
El oficialismo perdió el control del Senado en los comicios del domingo y aunque sigue siendo la primera minoría en la Cámara de Diputados acortó su diferencia con la alianza opositora de centroderecha Juntos por el Cambio, que se impuso en los principales distritos electorales. El resultado obliga al partido gobernante a consensuar la agenda legislativa en un escenario dominado por la inflación, el déficit fiscal, la pobreza y una incipiente recuperación que no logra contrarrestar el derrumbe del casi 10% de la actividad en 2020.
Sin embargo, Fernández arremetió contra sectores de la oposición: “Queremos que nos dejen de boicotear y nos dejen trabajar de una vez y para siempre. Dejen de sembrar odio”. Apuntó en especial contra su antecesor, el conservador Mauricio Macri (2015-2019): “Si no quiere hablar que se quede solo con sus amigos haciendo negocios”, en referencia a que el exmandatario adelantó que no aceptará la convocatoria del gobierno para consensuar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a fin de refinanciar una deuda de unos 45.000 millones de dólares.
Los analistas coinciden en que las diferencias públicas entre el presidente y la vicepresidenta y exmandataria Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) por el rumbo de la política económica también impactó en la derrota electoral. La dirigente no concurrió al acto.
Fuente: Diario las Américas