Es imposible separar el peso del fracaso de este gobierno de las declaraciones que realiza el jefe de Estado, absolutamente desgastado y con poco y nada de legitimación. Por estas horas, que Alberto Fernández cuestione duramente a un representante de la oposición y candidato es casi como hacerle un favor. Luego de su visita a Estados Unidos, Alberto Fernández arremetió contra Javier Milei y lo comparó con Hitler. Aunque parece a simple vista un ataque, lo cierto es que lo delirante del comentario parece generar el efecto contrario. Además de dejarlo mal parado a él, beneficia al precandidato a presidente, que, como si fuera poco, tiene una notoria admiración (casi un fanatismo) con la historia y el pueblo judío.
En una entrevista con el director de Perfil, que le preguntó al presidente sobre la influencia creciente del referente libertario, Alberto Fernández manifestó que Milei es «un peligro para la democracia». Lo comparó con Adolf Hitler, que llegó al poder mediante las elecciones, y pidió «abrirle los ojos a la gente», para que no vote por el candidato de La Libertad Avanza. Tan irrisoria fue su reflexión que los efectos en favor de Milei no tardaron en llegar. Para despegarse de la barbaridad en cuestión, Patricia Bullrich (principal competidora electoral directa) y Eduardo Feinmann (periodista alineado con Juntos por el Cambio), salieron a cuestionar el mensaje. Milei, agradecido. Hoy, debido a Fernández, el diputado está más sólido en la opinión pública que ayer.
En diálogo con fuentes del oficialismo consultadas por PanAm Post, hay acuerdo sobre una cuestión: los dichos fueron contraproducentes para sus intereses y no hacen otra cosa que beneficiar al diputado. Donde sí hay alguna discrepancia es sobre la razón del dislate. Mientras algunos consideran que fue un error más de la larga lista de Alberto, otros infieren (sin aclarar la razón) que el ataque habría tenido la finalidad que consiguió. Es decir, terminar de subirlo a la lucha grande por la presidencia.
Como era de esperar, la respuesta del diputado no tardó en llegar. Desde sus redes sociales, Javier Milei tildó de «ignorante» al presidente y le señaló que su banalización del Holocausto constituye un delito en Argentina. Para el referente libertario, «más allá de lo personal», Fernández «ofende la memoria de millones de personas víctimas de lo inaudito». En su comentario, el economista liberal compartió un video de una visita que realizó hace un tiempo al Museo del Holocausto en Buenos Aires.
¿Qué decía Alberto Fernández de Javier Milei antes de volver con Cristina Fernández de Kirchner?
Uno puede estar de acuerdo o no con el diputado libertario, pero lo que no le puede achacar es que haya cambiado su discurso. Desde su ingreso a la política, Milei ha mantenido las mismas propuestas que lo hicieron conocido en los medios de comunicación y sus libros. Allá por febrero de 2018, un año antes de reiniciar su alianza con Cristina Fernández de Kirchner, el actual mandatario decía que lo que decía el libertario era «impactante» y que «tenía razón en todo».